por Mª José Rey
Cualquier momento no es apropiado para compartir un cuento con los peques de la casa. Uno de los mejores momentos para ellos puede ser el previo al acostarse.
Con un cuento podemos ir invitándoles a que tengan bonitos y relajados sueños, especialmente dedicado a los que tienen aún dificultades para dormir solos/as en su cama.
Pero, antes de comprar cuentos, es mejor informarse y ojear algunos de ellos en las librerías. Por ello, es muy aconsejable acercarse a una librería o, en su caso, a la sección de libros de una gran superficie. Podrán ver, tocar y ojear los libros y cuentos tan variados que tienen. Es una buena forma de animarlos a leer aquello que les motiva visualmente con bellas ilustraciones y colores. Un bonito cuento puede estimularles las ganas de leer.
Es un buen regalo para cualquier ocasión, y además, es muy fácil de cuidar. Los conservarán y recordarán con ellos momentos entrañables cuando su papá y/o mamá se lo contaba a la hora de dormir.
Un libro que llega al corazón será difícil de olvidar.
Muchos juguetes caros y de moda suelen deteriorarse en pocos meses. Pero además, en muchas ocasiones, no les ayudan en su desarrollo global.
Los libros pueden convertirse en un bonito regalo "para toda la familia": para quién lo lee y para quien lo escucha.Aprovecharlos.
No lo olvidaréis, ni ellos y ellas tampoco.
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