Los niños y las niñas suelen pasar muchas horas jugando, alrededor de siete horas; lo que significa más o menos un tercio de sus vida. Cuando juegan, se sumergen en las fantasías más increíbles; desde crear barcos a resucitar a sus personajes y con la misma impunidad con la que puede regañar a sus muñecos y les habla como su madre le habla a él o a ella. Su capacidad no tiene limites; en ella se basa gran parte de su aprendizaje.
El niño y la niña deben de jugar a medida que crece y se transforma en adulto; sin embargo, no renuncia al placer que obtenía de la actividad lúdica. Simplemente la cambia por la fantasía; en sus ensoñaciones se dedica a hacer castillos en el aire. Como en sus sueños, el juego infantil es una realización de deseos; por ello, los niños y niñas casi siempre juegan a ser mayores. a través del dibujo y del juego, nos dicen lo que todavía no está en condiciones de expresar con palabras. Por eso, psicólogos y psicoanalistas lo utilizan en el tratamiento de los problemas psíquicos infantiles.
Mientras juegan, desarrollan y perfeccionan la coordinación de sus movimientos, la relación entre ojos y manos. También aprenden a razonar y a comprender las relaciones entre la forma, el tamaño y el volumen de los objetos. Piensan y aprenden a concentrarse para recordar las reglas del juego.
Cuando están jugando se socializan y aprenden a considerar a los demás, a compartir sus juguetes; pasan a una progresiva autonomía que le permite desplegar su actividad creadora. Para lograrlo, es necesario que los adultos les proporcionemos los juguetes adecuados para cada edad. Muchos de ellos tienen precios ajustados a los bolsillos corrientes. Cada año salen juguetes más sofisticados que a la semana se olvidan en alguna estantería o cajón.
En esta web encontrarás más información sobre el juego.
El niño y la niña deben de jugar a medida que crece y se transforma en adulto; sin embargo, no renuncia al placer que obtenía de la actividad lúdica. Simplemente la cambia por la fantasía; en sus ensoñaciones se dedica a hacer castillos en el aire. Como en sus sueños, el juego infantil es una realización de deseos; por ello, los niños y niñas casi siempre juegan a ser mayores. a través del dibujo y del juego, nos dicen lo que todavía no está en condiciones de expresar con palabras. Por eso, psicólogos y psicoanalistas lo utilizan en el tratamiento de los problemas psíquicos infantiles.
Mientras juegan, desarrollan y perfeccionan la coordinación de sus movimientos, la relación entre ojos y manos. También aprenden a razonar y a comprender las relaciones entre la forma, el tamaño y el volumen de los objetos. Piensan y aprenden a concentrarse para recordar las reglas del juego.
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